En respuesta a los frecuentes cortes de energía eléctrica que afectan al país y comprometen el desarrollo de las actividades académicas y prácticas, la Universidad de Cuenca ha dado un paso significativo al implementar aulas equipadas con energías alternativas, como la energía fotovoltaica. Esta iniciativa es el resultado del esfuerzo conjunto entre docentes y estudiantes, siendo pionera en la carrera de Automatización e Instrumentación de la Unidad de Formación Técnica y Tecnológica Salvador Allende (UCuencaTec).

En este primer caso, dieciséis estudiantes de dicha carrera han desarrollado un proyecto para transformar un aula en un espacio energéticamente autosustentable. Ximena Álvarez, directora de UCuencaTec, explica que “las aulas dependen de una única fuente de energía, la red eléctrica local. Esto significa que, ante un corte de energía, las clases y prácticas que requieren suministro eléctrico se ven interrumpidas. Por esta razón, los estudiantes del segundo ciclo planificaron e implementaron un sistema fotovoltaico que garantiza la autosuficiencia energética en un aula destinada a prácticas de laboratorio”.

Estudiantes trabajan en el nuevo cableado para el funcionamiento fotovoltaico. 

El proyecto consistió en la intervención del cableado eléctrico de las luminarias, con la adición de un breaker exclusivo para controlar la iluminación del aula de forma independiente de otros circuitos del edificio. Además, se diseñó e instaló un tablero de transferencia con luces piloto para indicar el estado del sistema, el cual está conectado a un panel solar ubicado en el techo y asegurado con una estructura de aluminio. Gracias a esta instalación, las actividades académicas pueden continuar incluso en horarios nocturnos, sin interrupciones causadas por los cortes de energía.

Esta primera aula fue desarrollada durante un ciclo académico, en el que los estudiantes, con el apoyo del docente John Llivicura, llevaron adelante la iniciativa. Para mediados de este año, el aula entró en funcionamiento y actualmente permite la continuidad de las clases, a pesar de los cortes de luz.

Aula del Laboratorio de Micro-Red

Un segundo caso es la implementación de una aula autosustentable en el Laboratorio de Micro-Red de la Facultad de Ingeniería, ubicado en el Campus Balzay. Este espacio académico utiliza paneles solares, un sistema de almacenamiento en baterías y una gestión energética inteligente para asegurar el funcionamiento continuo de equipos esenciales, como pizarras digitales, iluminación y computadoras portátiles, incluso durante cortes de energía.

El Laboratorio de Micro-Red, que es utilizado por estudiantes de pregrado de las carreras de Electricidad y Telecomunicaciones, así como por estudiantes de la Maestría en Ciencias de la Ingeniería Eléctrica, opera 32 horas semanales. Ante la crisis energética actual, la implementación de esta solución fue importante para garantizar la continuidad de las actividades académicas.

Danny Ochoa, docente de la Facultad de Ingeniería y jefe del Laboratorio de Micro-Red, explica que “el sistema de gestión energética activa automáticamente las baterías en caso de un corte de la red eléctrica o falta de luz solar. Durante cortes prolongados en la tarde o noche, el sistema puede proporcionar hasta 5 horas de autonomía. Si el corte ocurre durante el día, la energía generada por los paneles solares extiende esta autonomía, permitiendo el funcionamiento de los equipos por más tiempo”.

Estudiantes de la Carrera de Automatización e Instrumentación que desarrollaron el proyecto.