El día martes 23 de febrero de 2021 será recordado por la historia Latinoamericana como el día en el que se reflejó la crisis interna de una sociedad y de sus instituciones gubernamentales vinculadas con la administración pública de la convivencia social, la seguridad ciudadana y el derecho a la rehabilitación. Un total de 82 internos de tres cárceles del país perdieron la vida en un enfrentamiento marcado por signos de violencia sin precedentes. El hecho, que ocho días después no logra ser controlado en su totalidad, provocó una serie de reacciones desde lo político, mediático, y de redes sociales. Reacciones en muchos casos proporcionalmente similar con la experimentada en la población carcelaria, aunque no se derrame sangre.